Beisbol como la vida, la vida como el beisbol: nada está escrito y en cualquier inning, en cualquier juego y en cualquier diamante todo puede cambiar y hacer girar las 108 costuras para siempre, eso es lo que hace tan apasionante a la vida y al juego que, a muchos, nos ha enamorado desde pequeños.
La vida de Wilmer y su ahora esposa, Victoria López, cambió al conocerse a través de una red social, comenzando una relación de amistad que después se convertiría en un amor que los llevaría a vencer la complejidad de una relación en la que los estudios y el trabajo de ambos los mantendría la mayor parte del tiempo alejados, pero a la vez unidos por el amor que ambos tienen por el beisbol y que fue precisamente ese el hilo que los unió.
A lo largo de su relación, tanto los admiradores del pitcher mexicano, como los seguidores de Victoria fueron testigos de momentos importantes de su relación, así como el día a día de sumar kilómetros y kilómetros en cada diamante para poder estar juntos.
@victorialopezlope Lo manifesté? 🙈 A los 10 años fueron mis primeros juegos de béisbol y a los 21 me comprometí con mi jugador favorito ❤️🩹🙈
Recientemente unieron sus vidas en Oaxaca, con una ceremonia en compañía de sus seres queridos y una posterior fiesta en la que se exaltaron las tradiciones de El Espinal, Oaxaca.
Wilmer Ríos es, sin duda, uno de los mejores lanzadores mexicanos de la actualidad, hijo de una leyenda viviente del beisbol mexicano: Jesús “Chito” Ríos, quien marcó época en los diamantes con su labor en la lomita, al convertirse en el auténtico “rey del ponche”, es el máximo ponchador de todos los tiempos con 2,549 rivales abanicados. Con el beisbol en la sangre, Wilmer ha forjado su propia historia y su propia carrera, consolidándose en la pelota mexicana tanto de verano, en la Liga Mexicana de Beisbol, como en el invierno en la Liga ARCO Mexicana del Pacífico. Actualmente se prepara al recibir la invitación para Ligas Menores de los Rojos de Cincinnati, equipo de la MLB.