Luchando hasta el último out, la Liga Pequeña de Matamoros, representante de México en la Serie Mundial de Ligas Pequeñas en Williamsport consiguió un triunfo épico ante Cuba, para continuar con vida en el certamen internacional.
De manera temprana la ofensiva cubana se hizo presente en la pizarra, por lo que los bates mexicanos tuvieron que remar contra corriente desde el inicio del encuentro. Al llegar a la última entrada México caía 4-1 en la pizarra.
Con dos outs en la pizarra y dos peloteros en base llegó el turno de Antonio Guerrero, quien al primer lanzamiento envió las 108 costuras del otro lado de la barda para empatar la pizarra, provocando una explosión de emoción en la tribuna mexicana y siendo un auténtico balde de agua fría para las porras cubanas.
El épico regreso fue sellado en ese mismo inning por Ulises Ortiz , con cuadrangular de dos carreras firmó la victoria para México 6-4. Los nuestros ahora se medirán ante Venezuela, buscando una revancha de ganar o ganar en el torneo de selecciones infantiles más importante del rey de los deportes.