En los últimos meses, Padres de San Diego abrió la chequera para asegurar a sus mejores jugadores por cerca de $1,300 millones de dólares para las próximas 10 temporadas de MLB.
Una cifra que deja pálidos a la mayoría de equipos de las Grandes Ligas, va en contra de la moda “sabermétrica” impuesta por Tampa de que se puede competir sin grandes figuras ni grandes gastosy que parece además querer arrebatarle a los Yankees la fama de “los más grandes gastadores de la MLB“.
Tan sólo este invierno San Diego ha invertido cerca de $500 millones de dólares para asegurarse a Manny Machado, Xander Boggaerts y apenas ayer agregar a su joven estrella Jake Cronenworth; consolidando el mejor infield (en nuestra opinión) de todas las Grandes Ligas.
The Padres are making big moves 👀 pic.twitter.com/Q7VRncG3m1
— FOX Sports: MLB (@MLBONFOX) April 1, 2023
A ese infield súmele usted la inversión en Darvish, Musgrove y Suárez y no por nada tiene usted a uno de los grandes favoritos de esta temporada. La pregunta que todo mundo nos hacemos ahora es sí esta cifra le alanzará a San Diego para hacerse de la codiciada Serie Mundial.
Ojo: en los últimos años, Tampa, Astros y Bravos han dado una muestra de que un buen equipo es algo que no necesariamente se puede comprar. Y que en el béisbol moderno y buen trabajo con las granjas de prospectos, analítica y un manager experimentado pueden llevarte a donde la chequera no llegue.
Para muestra están estos mismos Padres que el año pasado no pudieron contra Dodgers. O los Mets, que a pesar de las grandes inversiones de su dueño Steve Cohen parecen seguir sin lograr consolidarse. O los Yankees que a pesar de ser los más grandes compradores e inversores de la Americana llevan años a la sombra de Astros.
¿Podrán los Padres romper esa inercia a punta de billetazos? Ya lo veremos. Por lo pronto todavía tienen un tema pendiente: saber si ofertarán los cerca de $500 millones de dólares que se dice vale el contrato del mejor bateador del negocio: el dominicano Juan Soto.
¿Usted los pagaría?